
No tenemos que temer que podamos equivocarnos, nos hace más fuertes y más sabios por que de los errores se aprende.
Estoy segura que habrá algún recuerdo alegres o tristes que te llene los ojos de lagrimas, a las lagrimas no hay que temerlas limpian el alma.
Poco a poco la vida nos enseña por quien merece la pena luchar y a quien hay ir dejando por el camino, esos que se quedan seguro que no comparten nuestros sentimientos.